sábado, 11 de febrero de 2012

Prólogo



Escrito por:
Luis Enrique Palma Urbina
Cuando German, mi compañero y amigo desde que comenzamos la carrera de Comunicación Social, me pidió que redactase estas palabras, acepté con toda  cortesía. Sin embargo, no tenía ni la mínima idea de lo que podía decir. Aun así, él me envío a mi correo este álbum, y yo accedí de nuevo a redactarle este prólogo, aún sin saber a qué me referiría en este. Por fortuna, tras haber leído sus escritos, mientras me resultaba difícil evitar sonreírme, obtuve la suficiente visión literaria que es necesaria en este tipo de reflexiones.

Con solo pasar mi vista por el nombre de este álbum, “La pluma de un novato”, recordé de inmediato a elnovato-grmanu.blogspot.com (espacio virtual que es administrado por German en su papel de bloguero). Supuse que la calidad e ingeniosidad de sus textos serían iguales a los de este sitio, y esto me provocó una gran motivación para que comenzase a leer. Además, el nombre “novato” sugiere que el autor es abierto ante todo tipo de críticas y sugerencias, porque no olvida que es como todo ser humano, que nunca deja de aprender en cada día a día.

El uso de la ironía es, sin duda alguna, un elemento característico en la mayoría de los textos escritos por la pluma de este novato. Este recurso pasa por el grito de una quesillera, el hambre de un cocodrilo, la soledad de un muerto, la arrogancia de un tipo bastante egocéntrico, la rebeldía de una ciudad, extravío de un voto y las cuerdas vocales de un cuenta chiste, y le otorga a cada uno de los relatos sus tonalidades de alegría y vivacidad. Vale destacar también, la manera en que German desempeña su papel como crítico social: uno que hace desde un lado satírico y realista a la vez.

Me alegra que este sea el estilo de mi amigo y que no haya tomado rumbo por los todos esos temas eróticos y existencialistas que se han puesto de moda. No tengo nada en contra de ellos, solo es cuestión de gusto. Yo, al igual que German debe pensar, opinó que el cuento debe ser utilizado principalmente para conseguir una sonrisa y educar con una reconfortante moraleja.

Por último, utilizo este medio para alentar a German en su papel del crítico social que utiliza como arma, la pluma y el papel. Y por supuesto, luego de equilibrar sus conocimientos gramáticos al nivel de su imaginación, le será más sencillo.